La industria sucroalcoholera es una de las que más crece en el mundo, y varios países de América Latina están beneficiándose de este sector promisor. Según datos de la Agencia de Protección Ambiental Americana (EPA), el etanol reduce en cerca de 90% los gases de efecto invernadero (GEI), comparado a la gasolina. Además de ser más sustentable, es una energía limpia, renovable y más viable del punto de vista económico. 

Hace casi diez años, la empresa peruana Sucroalcoholera Caña Brava apostó en ese mercado y, desde entonces, viene automatizando toda su producción, gracias al suministro de equipos y servicios de WEG.

El más reciente de ellos fue realizado para la ampliación de la fábrica, que pasará a producir también azúcar, y debe ser inaugurada en julio de este año.  La usina está ubicada al norte de Perú, y tiene capacidad de molienda de 4,8 mil toneladas día, generando una producción de 430 mil litros de etanol y 370 toneladas de azúcar, diariamente. Para llegar a impresionantes 8.640 horas de producción por año, la central sucroalcoholera contó con el suministro de soluciones WEG, incluyendo CCMs inteligentes con red Profibus-DP, celdas de media tensión, convertidores de frecuencia, arrancadores suaves, relés inteligentes, motores de baja y media tensión, cuadros de distribución, servidores y estaciones de operación, generadores, turbinas, nobreaks y banco de baterías.

Además del suministro de los equipos, WEG desarrolló y comisionó todo el software del sistema de control y supervisión (SCADA), además de instalar y certificar una moderna red de comunicación en la fábrica peruana, que incluye Ethernet, Profibus-DP y Profibus-PA. Toda la instrumentación de campo con red Profibus-PA, incluyendo el proyecto de instalación, también fueron suministrados. La estructura permite que Caña Brava opere de forma casi ininterrumpida, con paradas programadas solamente para limpieza y mantenimiento de los equipos. De esa forma es posible que trabajos como mantenimientos preventivos, mejorías y auxilio al cliente sean realizados remotamente por el equipo de WEG en conjunto. 

La producción opera 100% en modo automático, garantizando un fino control y repetición de los lotes integrados al control de calidad del laboratorio bioquímico de la planta. Con el plan de mantenimiento online, desarrollado en alianza con la propia central, es posible garantizar el mínimo de paradas no programadas, así como el bajo costo de mantenimiento. 

La plantación de caña de azúcar peruana tiene una característica peculiar: debido a las características del suelo de arenas desérticas, el cultivo es por goteo, lo que proporciona la siembra y el corte de la planta durante todo el año. Debido a tales características, el nivel de azúcares en la caña (Brix) es más elevado, generando una mayor producción de etanol por tonelada de caña.