WEG en colaboración con el fabricante de ventiladores belga CBV, ha contribuido al desarrollo de una isla de aprovechamiento energético autosuficiente de los residuos de Hong Kong. Se estima que la isla producirá un ahorro anual de emisiones de 440 000 toneladas de carbono, el equivalente de las emisiones anuales que producen 2,2 millones de automóviles de combustión interna.

Atendiendo al Acuerdo de París, el plan de acción climática del Gobierno de Hong Kong ha establecido el objetivo de reducir la cantidad de emisiones de CO2 para producir electricidad (intensidad de carbono) del país en un 65-70 % de las emisiones de 2005 para el año 2030. El territorio está progresando de modo constante hacia este ambicioso objetivo. En 2019, ya había reducido sus emisiones de carbono en más de un 35 %.

La nueva planta de aprovechamiento energético de residuos constituirá una nueva etapa en esta evolución. La planta dispondrá de seis líneas que suministrarán al territorio metropolitano de Hong Kong 2 GWh/día de electricidad, empleando un proceso de aprovechamiento energético de residuos de alto rendimiento. A esto se suma un sistema de depuración de gases de combustión de vanguardia que cumple las normas estrictas relativas a las emisiones.

El calor residual generado por la maquinaria será empleado para secar los residuos que llegan al sistema de clasificación mecánica de residuos. Una parte de este calor se empleará también para el sistema de refrigeración de los edificios de la isla. Una estación depuradora de aguas residuales asegurará el aprovechamiento de las aguas sin vertidos residuales, mientras que los paneles solares cubrirán las necesidades energéticas de la población trabajadora de la isla.

Además, la planta producirá 40 m3/h de agua desalada que será empleada en diversos procesos, el suministro a los edificios y la irrigación de las zonas verdes que se extienden a toda la isla, incluidas las fachadas de la planta de aprovechamiento energético de residuos. El proyecto prevé también el vertido de 1,2 millones de toneladas de residuos sólidos no reciclables generados por un tercio de la población de Hong Kong.

La planta de aprovechamiento energético de residuos comprende tres módulos de tratamiento, cada uno con dos líneas de incineración. Cada línea necesita un ventilador de tiro inducido y un ventilador secundario, cada uno con su motor eléctrico de accionamiento.

El proyecto ha necesitado un total de doce motores eléctricos WEG, seis del tipo HGF 500 de 1,300 kW, y seis tipo W22 315S/M de 132 kW. Los motores accionarán los ventiladores de tiro inducido y secundarios que CBV ha suministrado, los cuales son elementos esenciales de las líneas de incineración.

El contrato de diseño, construcción y explotación para la fase 1 del complejo de gestión integrada de residuos fue adjudicado en noviembre de 2017, y los motores eléctricos fueron suministrados en noviembre de 2021. Según el Departamento de Protección del Medio Ambiente del Gobierno de Hong Kong, se prevé que la fase 1 del proyecto sea completada y entre en servicio en 2025, contemplando el contrato un periodo de explotación de 15 años.

“La nueva planta de aprovechamiento energético de residuos contribuirá sustancialmente a que Hong Kong cumpla sus objetivos de sustentabilidad, pero, aún más importante, ayudará a reducir las emisiones mundiales de carbono, aproximándonos a los objetivos marcados por el Acuerdo de París”, explica Marek Lukaszczyk, el responsable de marketing para Europa y Medio Oriente de WEG. “Unos motores eléctricos fiables y de alto rendimiento son parte esencial de la compleja tecnología de las plantas de aprovechamiento energético de residuos, y WEG representa una opción natural para los proyectos que exigen durabilidad, alto rendimiento y una buena relación costo-beneficio. Estamos seguros de que los motores eléctricos que hemos suministrado prestarán un buen servicio durante muchos años”, ha concluido.